Podrían haberse limitado a desearle lo mejor, pero para el cumpleaños de Stan, sus amigos decidieron hacer todo lo posible. Un picnic en el bosque, lejos de todo, que se va a convertir en un touze. El joven tiene que elegir: cada invitado está dispuesto a ofrecer su culo o su polla. Las palas se revuelcan, chillando, la pandilla de Stan folla y se mezcla, probando los sabores de los demás. Es una orgía, el olor de la polla en pleno esfuerzo y los culos sudando como coños mojados. Un mega festín donde todos dan y comparten antes de correrse en pandilla.